domingo, 13 de septiembre de 2009

- 40 años sin The Beatles

Ya se ha encargado “El País” por todos los medios (prensa, radio y televisión) de que nos enteremos, que hoy es el 40 aniversario desde que Los Beatles se separaran definitivamente..
Nos podía haber sorprendido el mencionado matutino con una edición especial de toda su discográfica remasterizada a la moda de ahora, como otras veces ha sabido hacer y además ofrecérnoslo precio de “crisis”, pero no, se han dejado caer con esa horrorosa colección de tazas para el desayuno. No me imagino yo tomando un suculento chocolate y mojando unos churros por encima de la cabeza de John Lenon, mientras este pide “socorro”, o decorar la vitrina del salón con la colección completa de las tacitas decoradas con las carátulas de los elepes de los distinguidos chicos de Liverpool.
Menos mal que entre tantas horteradas, también los señores de “Prisa” nos has deleitado con un homenaje, que el siempre acertado Joan Manuel Serrat ha dedicado a los peludos escarabajos, el cual me atrevo a trasladaros como homenaje a ellos:

Nada volvió a ser igual

Nada volvió a ser igual. La bamba pasó a llamarse Twist and shout.
Las camisas de los domingos perdieron el almidón e incluso el cuello. Nuestros pelos se fueron asemejando a los del príncipe valiente, y mientras las greñas crecían, las faldas menguaban. Las guitarras españolas se enchufaron a la corriente
y de pronto nos dimos cuenta que sabíamos inglés She loves you yeah, yeah, yeah… Los conjuntos cambiaron su repertorio. Los vendedores de instrumentos musicales hicieron su agosto en plazos de 48 mensualidades.
En las noches de aquellos días, los tocadiscos giraban a revoluciones desconocidas hasta la fecha y las adolescentes que amábamos perdían el corazón por la garganta pensando en ellos mientras fingían bailar conmigo Love, love me do…
Antes que ellos hubo otros, y otros vendrían después, pero nadie como ellos agitó el poso de nuestras vidas.
A su imagen y semejanza nos hicimos rebeldes. Nos convertimos en individuos socialmente nocivos y en alguna ocasión nos atrevimos a ser irreverentes con la autoridad. Compartimos con ellos el primer canuto. A su vera hicimos el amor y a sus órdenes desertamos de la guerra.
Tal vez no fue suya toda la culpa, pero cuando estas cosas pasaron, ellos estaban allí y les juro que desde que llegaron a nuestras vidas nada volvió a ser igual.
Larga vida y gratitud a aquellos cuatro chicos de Liverpool que decían ser más famosos que Dios aunque sólo fuera para escandalizar a sus representantes en la Tierra.
Y luego está su música…
Ah, su música…

Joan Manuel Serrat 06/09/2009



Aquí os dejo como muestra la canción que siempre me ha deleitado más de ellos.
The Fool on the Hill (El loco de la colina)

Día tras día, solo en una colina
El hombre de ridícula sonrisa permanece perfectamente inmóvil
Pero nadie quiere conocerle
Piensan que está loco
Y él nunca responde
Pero el loco de la colina
Ve ponerse el sol
Y los ojos en su cabeza
Ven el mundo girando

Bastante avanzado, la cabeza en las nubes
El hombre de las mil voces habla perfectamente alto
Pero nadie le oye
Ni siquiera el sonido que parece hacer
Y él nunca parece darse cuenta
Pero el loco de la colina
Ve ponerse el sol
Y los ojos en su cabeza
Ven el mundo girando

Y a nadie parece gustarle
Pueden adivinar sus intenciones
Y él nunca muestra sus sentimientos
Pero el loco de la colina
Ve ponerse el sol
Y los ojos en su cabeza
Ven el mundo girando

Girando y girando y girando
El nunca les escucha
Sabe que los locos son ellos
Y a ellos no les gusta
Pero el loco de la colina
Ve ponerse el sol
Y los ojos en su cabeza
Ven el mundo girando.


No os ahoguéis en la añoranza.........disfrutar el instante, sonreír al pasado y vivir el momento............el futuro ya vendrá.